
17 de abril de 2025 a las 04:55
Esperanza en células madre: ¿Adiós al Parkinson?
La esperanza renace para quienes padecen la enfermedad de Parkinson. Dos estudios independientes, publicados en la prestigiosa revista Nature, abren una ventana a un futuro más prometedor gracias a la innovadora terapia de trasplante de neuronas derivadas de células madre. Aunque aún en etapas iniciales, los resultados son alentadores y sugieren la posibilidad de revertir, al menos parcialmente, los devastadores efectos de esta enfermedad neurodegenerativa.
Imaginen un mundo donde los temblores incontrolables, la rigidez muscular y la lentitud de movimientos, característicos del Parkinson, pudieran ser mitigados. Estos estudios, realizados en Estados Unidos, Canadá y Japón, nos acercan a esa realidad. La premisa es simple pero revolucionaria: reemplazar las neuronas dañadas, responsables de la producción de dopamina, con células nuevas y sanas.
El primer ensayo, llevado a cabo en Norteamérica, utilizó células madre embrionarias, cuidadosamente transformadas en células progenitoras neuronales. Estas células, tras ser criopreservadas, fueron implantadas en el putamen, una región cerebral crucial para el control motor, de 12 pacientes. Los resultados, tras 18 meses de seguimiento, revelaron un aumento en la producción de dopamina, incluso después de suspender la medicación inmunosupresora. Es decir, las células trasplantadas no solo sobrevivieron, sino que se integraron al cerebro y comenzaron a funcionar. Más aún, se observó una mejora significativa en los síntomas motores, especialmente en aquellos pacientes que recibieron una dosis mayor de células.
Por otro lado, el estudio japonés empleó una estrategia ligeramente diferente. En este caso, se utilizaron células adultas de un donante, reprogramadas para convertirlas en células progenitoras neurales. Estas células, sin necesidad de criopreservación, se implantaron en 7 pacientes. Los resultados, igualmente prometedores, mostraron un aumento en la producción de dopamina y una notable disminución en los temblores, permitiendo a los pacientes una mayor independencia en sus actividades diarias.
Si bien estos resultados son alentadores, es importante mantener la cautela. La Dra. Malin Parmar, experta en células madre de la Universidad de Lund, subraya que el número de participantes en ambos estudios es aún limitado para determinar la eficacia definitiva del tratamiento. La Dra. Jeanne Loring, de Scripps Research, coincide en este punto, señalando que las mejoras observadas, aunque significativas para algunos pacientes, podrían deberse, en parte, a la baja dosis de células trasplantadas.
Sin embargo, el hecho de que ambos estudios, con diferentes metodologías, hayan demostrado la seguridad y la viabilidad del trasplante neuronal, abre un camino esperanzador para futuras investigaciones. Aumentar el número de participantes, optimizar las dosis celulares y perfeccionar las técnicas de trasplante serán los próximos pasos en esta emocionante carrera contra el Parkinson. Un futuro donde esta enfermedad deje de ser una sentencia irreversible está cada vez más cerca. La ciencia, una vez más, nos ofrece un rayo de luz en la oscuridad.
Fuente: El Heraldo de México