17 de abril de 2025 a las 09:10
Encuentra justicia: Guía práctica
Nos encontramos en un momento crucial para la democracia mexicana. El autor del texto, Rubén Moreira, nos pinta un panorama sombrío, donde la narrativa oficial, hábilmente construida, busca desmantelar el Poder Judicial, presentándolo como el obstáculo para un supuesto avance. Se manipula la percepción ciudadana, explotando la complejidad del sistema judicial y ocultando los avances logrados. Se culpa a los jueces, mal pagados y sobrecargados, por la lentitud de los procesos, sin mencionar las deficiencias en las investigaciones, la tortura y las injustas imputaciones que plagan el sistema local.
Esta narrativa distorsionada allana el camino para una votación crucial, una farsa, según el autor, donde la ciudadanía desconoce a los contendientes y el propósito real de la contienda. El aparato estatal, con su maquinaria de acarreo y cuotas, se prepara para consumar la maniobra, con la complicidad de quienes alguna vez defendieron la democracia.
Ante este escenario desolador, ¿qué podemos hacer? Moreira propone la exhibición, desnudar la trama y sus consecuencias. La actuación de jueces inexpertos o deficientes, la falta de mejoras prometidas, deben ser puestas en evidencia. Universidades y colegios de abogados deben crear observatorios que documenten procesos y sentencias, analizando las decisiones judiciales ante la opinión pública nacional e internacional. Cada caso resuelto en contra del derecho debe convertirse en un escándalo que demuestre la impericia o la presión ejercida sobre los jueces.
La oposición, nos dice Moreira, encontrará un argumento irrefutable: esta farsa electoral no mejorará la justicia. Esta consigna debe resonar en el debate público. Sin embargo, la tarea no es sencilla. El poder, en su afán de control, busca silenciar las voces críticas, limitando la libertad de prensa y expresión.
Pero el silencio no es una opción. Debemos estar informados, cuestionar la narrativa oficial y exigir transparencia. La defensa del Poder Judicial no es una lucha aislada, es la defensa de nuestra democracia, de nuestro derecho a un juicio justo y a un Estado de Derecho. La complejidad del sistema judicial no debe ser excusa para la manipulación, sino un llamado a la participación ciudadana informada.
La batalla por la justicia es una batalla por la verdad. Y en esta batalla, la información, el análisis crítico y la denuncia son nuestras armas más poderosas. No podemos permitir que la narrativa oficial nos ciegue ante la realidad. El futuro de nuestra democracia está en juego.
Fuente: El Heraldo de México