La semana culmina con una danza celestial de gran impacto. Tras el paso lunar por Escorpio, que nos sumergió en las profundidades de nuestras emociones y nos impulsó a una introspección casi obligatoria, emerge un nuevo escenario con la entrada de la Luna en Sagitario. Si bien este tránsito promete una bocanada de aire fresco, infundiendo optimismo, ansias de explorar y una visión más amplia de las cosas, la conjunción de Marte y Neptuno en Piscis, sumada a la incipiente retrogradación de Plutón desde Capricornio, añade un matiz de complejidad que no podemos ignorar.

Este cóctel cósmico nos coloca en una encrucijada. La energía sagitariana nos impulsa hacia adelante, invitándonos a lanzarnos a la aventura, mientras que la influencia pisciana nos envuelve en una nebulosa de ensueño e idealismo. Plutón retrógrado, por su parte, remueve las capas más profundas de nuestro ser, sacando a la luz viejas heridas y patrones subconscientes que exigen ser revisados. Este tira y afloja energético puede generar confusión, dificultando la toma de decisiones claras y asertivas. Por ello, la prudencia se convierte en nuestra mejor aliada.

Si te encuentras entre los signos más afectados por esta configuración astral, sentirás la presión de tomar decisiones importantes. Sin embargo, la recomendación es resistir la impulsividad. Este no es el momento de actuar precipitadamente. Respira hondo, conéctate con tu centro y date el tiempo necesario para evaluar todas las variables. La introspección que nos regaló el tránsito lunar por Escorpio ha sembrado la semilla de la transformación. Ahora, con la Luna en Sagitario, podemos vislumbrar nuevos horizontes, pero debemos hacerlo con los pies bien plantados en la tierra.

El fin de semana se presenta como un oasis en medio de esta tormenta cósmica. Es el momento perfecto para hacer una pausa, recargar energías y reflexionar sobre el camino recorrido. Evita firmar contratos o iniciar nuevos proyectos. La energía astral no es propicia para ello. Espera a que la semana entrante aclare el panorama. Si una decisión urgente se impone, busca el consejo de alguien de confianza, una perspectiva externa puede iluminar el camino.

Jueves y viernes fueron días para la introspección, para cerrar ciclos y sanar viejas heridas. El sábado y domingo nos invitan a mirar hacia el futuro con entusiasmo y optimismo, pero sin perder la claridad mental. La intuición puede ser una valiosa guía, pero debemos asegurarnos de no confundirla con la evasión. La honestidad con nosotros mismos es fundamental en este proceso.

No temas a la intensidad de este momento. Es una oportunidad para crecer, para evolucionar y para conectar con nuestra verdadera esencia. Aprovecha la energía del fin de semana para nutrir tu cuerpo, mente y espíritu. Medita, conecta con la naturaleza, disfruta de la compañía de tus seres queridos. Recuerda que la calma y la paciencia son tus mejores aliadas en este viaje de autodescubrimiento. Al tomar decisiones conscientes y responsables, estarás construyendo un futuro más sólido y auténtico.