
18 de abril de 2025 a las 02:25
Arabia Saudita: El legado de Sulaimán
El boxeo respira un nuevo aire, un aire cargado de la historia milenaria de Medio Oriente. Desde las arenas doradas de Arabia Saudita, el eco de los guantes resonando en los cuadriláteros se mezcla con la emoción palpable de un sueño hecho realidad. No es solo el choque de titanes, el baile de puños y la estrategia en cada movimiento; es la culminación de una visión, un legado familiar que se materializa bajo el intenso sol árabe. Don José Sulaimán, figura legendaria del pugilismo, anhelaba ver el boxeo florecer en estas tierras, un anhelo que su hijo, Mauricio Sulaimán, presidente del CMB, hoy atestigua con orgullo y emoción contenida.
Recordemos que el camino no siempre fue claro. Las turbulencias geopolíticas, como la guerra que frustró un combate de Mike Tyson en Líbano, pusieron a prueba la perseverancia de esta visión. Sin embargo, la pasión por el deporte, la convicción de unir culturas a través del cuadrilátero, se mantuvo firme. Hoy, esa semilla plantada con esperanza germina con fuerza, dando frutos en eventos de alto calibre que atraen la mirada del mundo a Turquía y Arabia Saudita.
Y México, cuna de campeones, no podía faltar a esta cita histórica. Con una representación digna de su legado boxístico, tres de cuatro pugilistas mexicanos avanzaron de ronda, dejando una huella imborrable en la arena internacional. La presencia de figuras como Saúl “Canelo” Álvarez y Jaime Munguía, ya instalados en Riad, confirma la importancia de este evento y la fuerte conexión entre México y el boxeo mundial. Verlos entrenar, sentir la energía que emanan, es un recordatorio constante de la grandeza de este deporte. Es un orgullo para México, un orgullo que resuena en cada rincón de Riad.
Imaginen la escena: el emblemático 5 de mayo, fecha tradicionalmente ligada a las vibrantes luces de Las Vegas, ahora brillando con intensidad en un escenario completamente nuevo. Una fecha que resonará con fuerza en la historia del boxeo, marcando un antes y un después en el calendario pugilístico.
Pero no todo es gloria y espectáculo. Detrás de cada golpe, de cada entrenamiento, se esconde un esfuerzo titánico por parte de los atletas. Adaptarse al nuevo entorno, al clima desértico, al aire denso y a un ritmo de vida nocturno impuesto por el calor, requiere una preparación física y mental excepcional. La decisión del equipo de “Canelo” de llegar con anticipación demuestra la seriedad y el compromiso con la excelencia que caracteriza al campeón mexicano. Ajustar los horarios de entrenamiento, las rutinas de alimentación y el descanso, son factores cruciales para garantizar un rendimiento óptimo en el ring. La pelea, programada para las seis de la mañana hora local, permitirá que el público mexicano disfrute del espectáculo en horario estelar, un detalle que resalta la consideración y el respeto por la afición.
Para Mauricio Sulaimán, esta experiencia representa un regreso a sus raíces, a la esencia misma de su pasión por el boxeo. Después de años dedicados a la gestión ejecutiva, volver a la operación directa de los eventos le inyecta una energía renovada, una vitalidad que se contagia a todo el equipo. Es la satisfacción del trabajo bien hecho, la emoción de ver un sueño cumplido, el orgullo de ser parte de un momento histórico para el boxeo.
Fuente: El Heraldo de México