Vecinos de la colonia Bello Horizonte, en el municipio de Tultitlán, Estado de México, se encuentran consternados tras el violento incidente ocurrido este martes al mediodía. Un presunto ataque armado dentro de un centro de reciclaje ubicado sobre la avenida Estado de México dejó un saldo de dos personas fallecidas. El silencio habitual de la calle se rompió con el sonido de las detonaciones, sembrando el pánico entre los residentes y comerciantes de la zona. Muchos se refugiaron en sus hogares y negocios, mientras que otros, con cautela, se asomaban para intentar comprender la magnitud de lo sucedido.

La información preliminar que ha trascendido apunta a que una de las víctimas podría ser el propietario del establecimiento. Si bien las autoridades aún no han confirmado oficialmente esta información, la incertidumbre se cierne sobre la comunidad, que se pregunta quiénes son las víctimas y cuál fue el móvil de este terrible acto. El hermetismo en torno a la identidad de los fallecidos alimenta las especulaciones y la ansiedad entre los vecinos, quienes exigen a las autoridades celeridad en las investigaciones y transparencia en la información.

Agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) y peritos se encuentran en el lugar de los hechos recabando evidencias. Cintas amarillas delimitan el área, impidiendo el paso a curiosos y protegiendo la escena del crimen para la correcta recolección de pruebas. Se espera que el análisis de los casquillos, las trayectorias de los disparos y cualquier otro indicio encontrado en el lugar, arroje luz sobre la dinámica del ataque y ayude a identificar a los responsables.

Testigos presenciales están siendo interrogados por las autoridades, buscando reconstruir los momentos previos al ataque. Sus testimonios serán cruciales para comprender las circunstancias que rodearon el incidente y determinar si se trató de un robo, un ajuste de cuentas o algún otro motivo. La colaboración ciudadana será fundamental para esclarecer este doble homicidio y llevar a los culpables ante la justicia.

Este lamentable suceso ha generado una ola de indignación y preocupación entre los habitantes de Tultitlán. La violencia que ha azotado a la región en los últimos meses ha dejado una profunda huella en la comunidad, que exige mayor seguridad y acciones concretas por parte de las autoridades para frenar la ola de criminalidad. Se espera que este caso no quede impune y que se haga justicia a las víctimas y sus familias.

La colonia Bello Horizonte, usualmente tranquila, ahora se encuentra bajo un manto de tristeza e incertidumbre. La vida cotidiana se ha visto interrumpida por la violencia, dejando a su paso dolor y preguntas sin respuesta. Mientras las investigaciones continúan, la comunidad espera con ansias el esclarecimiento de los hechos y la captura de los responsables, con la esperanza de que este tipo de tragedias no se vuelvan a repetir. El futuro de la colonia, como el de tantas otras afectadas por la violencia, depende de la capacidad de las autoridades para garantizar la seguridad y la justicia para todos sus habitantes.