
15 de abril de 2025 a las 23:15
Capturan rostro de ladrón de camiones
La inseguridad en las autopistas del Estado de México se ha convertido en una pesadilla para los transportistas. La Chamapa-Lechería, una vía crucial para el comercio y el tránsito en la región, se ha transformado en un escenario de terror donde bandas criminales operan con impunidad, utilizando tecnología avanzada y una violencia escalofriante. El reciente video del asalto del 9 de abril a las 11:18 a.m. es una prueba irrefutable de la audacia y la organización de estos grupos delictivos. La precisión con la que ejecutan el robo, la coordinación entre los vehículos involucrados, el uso de inhibidores de señal y el armamento que portan, demuestran que no se trata de delincuentes improvisados. La imagen del asaltante que se quita la capucha y el cubrebocas frente a la cámara, casi desafiante, es una bofetada a la seguridad y a la justicia. Es un acto de soberbia criminal que exige una respuesta contundente por parte de las autoridades.
Este no es un caso aislado. El video captado dos minutos antes, a las 11:15 a.m., muestra a la misma banda intentando otro asalto. La rápida reacción del trailero, quien logró escapar en reversa, evitó que se consumara el robo, pero la determinación de los delincuentes, quienes incluso dispararon contra el vehículo en fuga, demuestra la peligrosidad a la que se enfrentan quienes transitan por esta vía. La frustración del primer intento parece haberlos llevado a ejecutar el robo con mayor violencia minutos después. La escalada de violencia culminó con el asesinato del trailero Óscar en la madrugada del 10 de abril. Seis disparos contra la cabina de su tráiler acabaron con su vida y dejaron a su copiloto como testigo del brutal ataque. La impunidad con la que operan estos criminales es indignante. La tardanza de las autoridades en llegar al lugar del crimen, a pesar de las llamadas de emergencia, es una muestra de la vulnerabilidad de los transportistas y la falta de respuesta efectiva ante estos hechos.
La autopista Chamapa-Lechería no es la única afectada. Reportes similares llegan desde el Arco Norte y la vía Texcoco-Calpulalpan, dibujando un panorama preocupante de inseguridad en las carreteras del Estado de México. Estos grupos organizados, equipados con camionetas pesadas, armamento de alto calibre e inhibidores de señal, actúan con una planificación y una precisión que exige una estrategia de seguridad igualmente sofisticada. No podemos permitir que las autopistas se conviertan en zonas de terror. Es urgente que las autoridades implementen medidas efectivas para combatir a estas bandas criminales, que refuercen la vigilancia en las carreteras, que investiguen a fondo estos casos y que lleven ante la justicia a los responsables. La difusión de las imágenes del asaltante es un primer paso, pero no es suficiente. Se necesita una acción coordinada entre las diferentes instancias de gobierno para garantizar la seguridad de quienes transitan por estas vías y para devolver la tranquilidad a los transportistas, quienes arriesgan su vida a diario para mantener el flujo del comercio y la economía del país. La vida de Óscar y la seguridad de todos los que utilizan estas carreteras no pueden ser el precio que paguemos por la inacción.
Fuente: El Heraldo de México