
Inicio > Noticias > Automotriz
15 de abril de 2025 a las 23:55
Asegura tu viaje, revisa tu auto esta Semana Santa
Con el sol chiapaneco brillando con toda su intensidad y las vacaciones llamando a la aventura, es crucial recordar que la seguridad vial comienza mucho antes de encender el motor. Adalberto Roney Zenteno Hernández, un experimentado mecánico automotriz con más de 15 años bajo el cofre, nos recuerda la importancia vital del mantenimiento preventivo, especialmente en esta temporada de altas temperaturas. No se trata solo de llegar al destino, sino de hacerlo con la tranquilidad de saber que nuestro vehículo está en óptimas condiciones.
Imaginen esto: la familia lista, las maletas empacadas, la emoción a flor de piel… y de repente, en medio de la carretera, el motor empieza a fallar, el humo se eleva del capó y la frustración se apodera del viaje. Una situación que, lamentablemente, es más común de lo que pensamos, y que en la mayoría de los casos, podría haberse evitado con una simple revisión preventiva. Zenteno Hernández nos advierte que en su taller, durante la Semana Santa, la afluencia de vehículos con problemas de sobrecalentamiento se incrementa notablemente, una clara señal de que muchos automovilistas postergan este crucial chequeo.
"Es mejor invertir unas horas en la revisión que arriesgar la integridad de la familia en un percance vial", afirma el experto. Y tiene toda la razón. Un viaje placentero no debe verse empañado por la incertidumbre de un vehículo en mal estado. ¿Vale la pena arriesgarlo todo por ahorrarse un poco de tiempo y dinero en un mantenimiento preventivo? La respuesta es un rotundo no.
Pero, ¿qué implica realmente este mantenimiento? Más allá del cambio de aceite y la revisión de los niveles de líquidos, existen otros aspectos cruciales que a menudo pasan desapercibidos. Zenteno Hernández destaca la importancia de revisar minuciosamente el sistema de enfriamiento, incluyendo mangueras, radiador y termostato. Una pequeña fuga en una manguera, aparentemente insignificante, puede desencadenar un sobrecalentamiento severo, obligando a reparaciones costosas e inesperadas, como la rectificación de la cabeza del motor. Imaginen el impacto no solo en el bolsillo, sino también en la planificación del viaje.
Asimismo, las llantas, las balatas y el sistema de frenos merecen una atención especial. Unas llantas desgastadas o con la presión inadecuada pueden comprometer la estabilidad del vehículo, especialmente en carreteras con curvas o en condiciones climáticas adversas. Las balatas, por su parte, son esenciales para un frenado efectivo y seguro. Un fallo en el sistema de frenos puede tener consecuencias devastadoras, poniendo en riesgo la vida de los ocupantes del vehículo y de otros usuarios de la vía.
Zenteno Hernández hace un llamado a la responsabilidad individual. "No es necesario ser un experto en mecánica para realizar una revisión básica", afirma. Revisar el nivel de aceite, el líquido refrigerante, el estado de las llantas y las luces del vehículo son tareas sencillas que cualquier persona puede realizar. Sin embargo, si se planea un viaje largo, la recomendación es acudir a un mecánico de confianza para un servicio preventivo más completo.
En definitiva, la prevención es la clave para disfrutar de unas vacaciones seguras y sin contratiempos. Un pequeño esfuerzo en el mantenimiento de nuestro vehículo puede marcar la diferencia entre un viaje inolvidable y una experiencia amarga. No esperemos a que el problema aparezca en medio de la carretera. Tomemos las riendas de nuestra seguridad vial y pongamos nuestro vehículo a punto antes de emprender la aventura.
Fuente: El Heraldo de México