La ola Hallyu ha llegado con fuerza a Latinoamérica, y Stray Kids lo ha comprobado de primera mano. Su reciente visita a México, como parte de su gira mundial "DominATE", ha dejado una huella imborrable tanto en los corazones de las STAYs mexicanas como en la historia del K-Pop en el país. No solo lograron un sold out rotundo en las dos fechas programadas en el Estadio GNP (antes Foro Sol), sino que tuvieron que liberar boletos adicionales ante la abrumadora demanda, una hazaña que pocos artistas internacionales consiguen en su primera visita.

Imaginen la escena: un estadio vibrante, casi sesenta mil almas coreando al unísono cada canción, luces de colores danzando al ritmo de la música, un espectáculo pirotécnico que iluminaba el cielo nocturno de la Ciudad de México y un escenario imponente con un gigante emergiendo durante la interpretación de "Giant". No era un sueño, era la realidad que vivieron las afortunadas STAYs que presenciaron la entrega total de Bangchan, Lee Know, Changbin, Hyunjin, Han, Felix, Seungmin y I.N.

Desde el anuncio de su llegada, la expectativa fue palpable. Las redes sociales se inundaron de mensajes de emoción, teorías sobre el setlist y, por supuesto, la incesante búsqueda de boletos. El furor por Stray Kids se respiraba en el aire, confirmando el impacto global que la banda ha alcanzado en los últimos años, llenando estadios en diversos países y rompiendo récords de ventas.

La travesía latinoamericana de Stray Kids, que incluyó paradas en Perú, Brasil y Chile, culminó en México con un broche de oro. Cada concierto fue un sold out, demostrando la fidelidad y el entusiasmo de las fans latinoamericanas. Y México no fue la excepción, la energía del público mexicano, la pasión con la que coreaban cada canción, desde "Miroh" y "S-Class" hasta "God's Menu" y "Back Door", creó una atmósfera única que conmovió a los integrantes de la banda.

Pero la conexión no se limitó al escenario. Los chicos de Stray Kids se mostraron cercanos y encantados con la cultura mexicana, disfrutando de la gastronomía local, en especial de los tacos, y aprendiendo algunas frases en español que compartieron con sus fans, como "Órale", "Qué te pasa", "Muy chido" y el infaltable "Wey". Estos gestos, pequeños pero significativos, fortalecieron el vínculo entre la banda y las STAYs mexicanas.

La promesa de Bangchan, líder del grupo, de regresar a México resonó con fuerza en el estadio. Y no es para menos, la entrega de las fans, la magia del concierto y el éxito rotundo de su primera visita, han sembrado la semilla para un futuro reencuentro. La historia de Stray Kids en México apenas comienza, y promete ser un capítulo lleno de música, energía y mucha, mucha pasión. El K-Pop ha encontrado un hogar en México, y Stray Kids, sin duda, ha conquistado un lugar especial en el corazón de miles de fans.