El ocaso del emblemático billete de 100 pesos con la imagen de Nezahualcóyotl se acerca. Este 2025 marca el fin de su circulación, una noticia que ha resonado en los bolsillos de todos los mexicanos. Si bien la melancolía nos invade al despedirnos de un billete tan familiar, es importante entender las razones detrás de esta decisión y, sobre todo, saber qué hacer con esos billetes rojos que aún guardamos con cariño (o quizás olvidados en algún rincón de la casa).

El Banco de México (Banxico) ha sido claro: la modernidad y la seguridad son las claves de esta transición. Los billetes, al igual que la tecnología, evolucionan. Las técnicas de falsificación se sofistican, y nuestro sistema monetario debe mantenerse un paso adelante. Por ello, la necesidad de reemplazar el billete de Nezahualcóyotl, perteneciente a la familia D1, por diseños más seguros y difíciles de replicar. No se trata de borrar la historia, sino de proteger nuestro presente y futuro económico.

Recordemos que convivimos con dos billetes de 100 pesos. El que se retira, de color rojo y con más de 20 años en circulación, nos muestra al gran poeta y gobernante Nezahualcóyotl, acompañado de un códice y, en el reverso, la majestuosidad del Templo Mayor junto a un poema en náhuatl. Un billete cargado de historia y cultura, impreso en algodón. Sin embargo, sus medidas de seguridad han quedado rezagadas ante la sofisticación de los nuevos billetes.

El billete que continuará vigente, con la efigie de Sor Juana Inés de la Cruz, pertenece a las familias F y G. Fabricado en polímero, incorpora tintas especiales, relieves táctiles y una mayor resistencia al desgaste del uso diario. Una verdadera fortaleza en nuestros bolsillos, preparada para el trajín cotidiano.

Ahora bien, ¿qué hacer con esos billetes de Nezahualcóyotl que aún conservamos? ¡Que no cunda el pánico! Banxico ha previsto una transición suave. Podrás seguir utilizándolos en tus compras diarias, en tiendas y supermercados, sin ningún problema. La diferencia radica en que los bancos ya no los entregarán, y los que reciban serán retirados de circulación paulatinamente.

Este cambio nos invita a reflexionar sobre la evolución constante de nuestro dinero. Desde las antiguas monedas de oro hasta los modernos billetes de polímero, la historia del dinero es un reflejo de nuestra propia historia. El billete de Nezahualcóyotl, aunque deje de circular, seguirá vivo en nuestra memoria como un símbolo de una época. Un recordatorio tangible de la riqueza cultural y la constante transformación de nuestro país. Así que, antes de que desaparezca por completo, tómate un momento para apreciar su diseño, su historia y su significado. Un pequeño homenaje a un billete que nos acompañó por tantos años.