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13 de abril de 2025 a las 06:55
Incendio forestal consume 500 hectáreas en Oaxaca.
La voracidad de las llamas continúa azotando los bosques de Oaxaca. Un incendio forestal de magnitudes considerables se extiende implacablemente por los municipios de Santo Domingo Tomaltepec, San Francisco Lachigoló, Santa Catarina de Sena y localidades aledañas, consumiendo a su paso un patrimonio natural invaluable. La situación, que se agravó por las fuertes ráfagas de viento registradas en las últimas horas, ha generado una movilización sin precedentes de recursos y personal para combatir las llamas. La llegada del helicóptero Bell UH-1H, equipado con un helibalde con capacidad de descargar 1200 litros de agua, inyecta una dosis de esperanza en la lucha contra el fuego. Imaginen la escena: desde las alturas, el helicóptero descarga una y otra vez toneladas de agua sobre las áreas más críticas, en un intento desesperado por enfriar el terreno y frenar el avance destructor del incendio. El Gobernador Salomón Jara Cruz, a través de su cuenta en la red social “X”, ha informado de la incansable labor de las brigadas. Hombres y mujeres de la Comisión Estatal Forestal Oaxaca (COESFO), la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), la Guardia Nacional, el Ejército Mexicano, la Policía Estatal, Delegados de Paz de la Secretaría de Gobierno, así como comuneros y voluntarios de las zonas aledañas, trabajan codo con codo, en una lucha contra reloj para controlar y finalmente liquidar el siniestro.
Las autoridades forestales estiman que la superficie afectada alcanza ya las 500 hectáreas. El fuego, que se originó en Santo Domingo Tomaltepec, se propagó con una velocidad alarmante hacia San Francisco Lachigoló, Santa Catarina de Sena y El Tule, impulsado por las ráfagas de viento. A pesar de los esfuerzos titánicos, el incendio se mantiene activo, con un 75% de control reportado, lo que evidencia la ferocidad del siniestro.
La angustia y la desesperación se han apoderado de los habitantes de la zona. En un acto de protesta, algunos bloquearon por un par de horas el crucero de Pemex, exigiendo mayor apoyo para combatir las llamas que amenazan sus hogares y sus medios de vida. La solidaridad no se ha hecho esperar. Brigadas de la COESFO, CONAFOR, Ejército y Guardia Nacional se desplegaron en la zona desde el primer momento, sumándose a las autoridades municipales, voluntarios y ciudadanos en una cadena humana de apoyo a la población afectada.
Un testimonio conmovedor da cuenta de la magnitud de la tragedia: pobladores de Tlalixtac de Cabrera han avistado venados que, huyendo del fuego, han descendido de las zonas boscosas afectadas. Estas imágenes nos recuerdan el impacto devastador del incendio en la fauna de la región.
Sobre el origen del incendio, las primeras investigaciones apuntan a una presunta quema de basura cerca de la presa “La Rosita”. De confirmarse esta hipótesis, estaríamos ante un acto de negligencia con consecuencias catastróficas. Las autoridades competentes deberán realizar las investigaciones correspondientes para determinar las causas del siniestro y deslindar responsabilidades. Mientras tanto, la lucha contra el fuego continúa. Cada minuto cuenta en esta batalla contra las llamas, una batalla por preservar el patrimonio natural de Oaxaca.
Fuente: El Heraldo de México