Logo
NOTICIAS
play VIDEOS

Inicio > Noticias > Seguridad

14 de abril de 2025 a las 01:40

Accidente ferroviario en Zacatecas deja heridos

La tarde del 13 de abril se tiñó de incertidumbre en la capital zacatecana. Un estruendo metálico, seguido de una nube de polvo, anunciaba la noticia: el descarrilamiento de un tren en las inmediaciones del Fraccionamiento San Fernando. La escena, que bien podría haber sido sacada de una película de catástrofes, se desarrollaba ante los ojos atónitos de migrantes centroamericanos que esperaban el paso del tren conocido como “La bestia”, y de los voluntarios del colectivo “Máquina 30-30, amor sin fronteras”, quienes les brindaban apoyo.

Guadalupe Cuevas, activista del colectivo, relató con voz aún temblorosa cómo presenciaron el incidente. "Estábamos aquí, apoyando a los migrantes, cuando vimos que un vagón automotriz venía ya muy ladeado. Nos hicimos a un lado y, justo en ese instante, se descarriló," explicó, dibujando con sus manos la trayectoria errática del vagón. La imagen del pesado metal retorciéndose sobre las vías quedó grabada en su memoria.

Lo que pudo haber sido una tragedia de magnitudes inimaginables, se convirtió en un milagro. Daniel Pedroza, documentalista español presente en el lugar, relató cómo un carrito de helados, de esos que anuncian su llegada con melodías infantiles, evitó lo peor. “Un minuto antes del descarrilamiento estábamos jugando con los niños migrantes en las vías. Llevábamos horas ahí y los niños se aburrían. Vino el camión de la nieve y fuimos a comprarles algo. En ese preciso momento, comenzó el descarrilamiento”, narró con la voz entrecortada por la emoción. La imagen de los niños jugando en las vías, momentos antes del accidente, se le repetía una y otra vez en la mente. El destino, en forma de un carrito de helados, les había dado una segunda oportunidad.

Tres vagones, dos de carga y uno que transportaba a una decena de elementos de la Guardia Nacional, quedaron fuera de la vía. A pesar del impacto y la confusión, los uniformados reaccionaron con prontitud. Implementaron los protocolos de protección a la ciudadanía, demostrando una admirable profesionalidad en medio del caos. Daniel Muzquiz, periodista sonorense que cubría la situación de los migrantes, fue testigo de la rápida respuesta de los agentes. “Hay que reconocer la labor importante de ellos. Inmediatamente se pusieron a salvo y a resguardar a las personas, aun cuando acababa de pasar esto, en cuestión de minutos,” comentó, impresionado por la eficiencia del operativo.

Tres de los diez guardias nacionales resultaron con golpes, pero afortunadamente fueron atendidos por los servicios de emergencia y se reportan fuera de peligro. Ninguna otra persona resultó afectada. Mientras las grúas trabajaban para retirar los vagones descarrilados, la pregunta flotaba en el aire: ¿qué causó el accidente? Las autoridades investigan las causas del incidente, analizando cada detalle para desentrañar el misterio que rodea a este suceso que, por fortuna, no se convirtió en una tragedia. La solidaridad de los voluntarios, la rápida reacción de las autoridades y, quizás, la intervención de un carrito de helados, evitaron que la historia de ese 13 de abril en Zacatecas se escribiera con letras de dolor.

Fuente: El Heraldo de México