
11 de abril de 2025 a las 21:45
¡Multas de locura por llevar a tu perro en el coche! 😱
Llevar a nuestras queridas mascotas en el auto se ha vuelto parte de nuestra rutina, una extensión de la familia que nos acompaña en aventuras y diligencias por la vibrante Ciudad de México. Sin embargo, este gesto de amor y compañÃa debe ir siempre de la mano de la responsabilidad y el conocimiento de las normas de tránsito. No se trata solo de evitar una multa, se trata de proteger a quienes más queremos, tanto dentro como fuera del vehÃculo. Imaginen un frenazo repentino: un perro suelto dentro del auto se convierte en un proyectil, poniendo en riesgo su vida y la de los pasajeros.
El Reglamento de Tránsito de la CDMX es claro: nuestros compañeros caninos deben viajar en los asientos traseros, asegurados con arneses o correas que los mantengan en un solo lugar. Piensen en ello como un cinturón de seguridad para ellos, una medida sencilla que puede marcar la diferencia entre un viaje tranquilo y una tragedia. No es una restricción arbitraria, es una salvaguarda, una forma de asegurar que nuestro fiel amigo llegue a su destino sano y salvo.
Muchos piensan que sostener a su pequeño perro en brazos es suficiente, una muestra de cariño y protección. Pero, ¿qué sucede en una situación de emergencia? Nuestros instintos de protección pueden fallar, y ese abrazo protector puede convertirse en una prisión peligrosa. Las manos del conductor deben estar libres para reaccionar, para maniobrar, para proteger a todos los ocupantes del vehÃculo.
La multa por incumplir estas normas no es un castigo, es un llamado a la conciencia. Es una inversión en la seguridad de nuestra mascota, de nuestra familia y de la comunidad. Esos 1,131 a 2,262 pesos representan la diferencia entre un susto y una tragedia. Un costo insignificante comparado con el bienestar de nuestro compañero peludo.
Más allá de la obligación legal, existen otras medidas que podemos tomar para convertir cada viaje en una experiencia placentera y segura para nuestra mascota. Una jaula o transportadora, especialmente para perros pequeños o medianos, puede ser su refugio móvil, un espacio propio donde se sientan seguros y protegidos. Asegurémonos de que cuenten con una buena ventilación, especialmente en los dÃas calurosos de la ciudad. Un ventilador portátil puede ser un aliado invaluable, y nunca, bajo ninguna circunstancia, los dejemos solos dentro del auto, expuestos al calor sofocante.
La hidratación también es fundamental. Un recipiente con agua fresca debe ser parte del equipaje de viaje de nuestra mascota. Imaginen la sed que podemos sentir nosotros después de un trayecto bajo el sol; ellos también la sufren. Mantenerlos hidratados es una muestra de cariño, una forma de asegurar su bienestar en cada kilómetro recorrido.
Llevar a nuestra mascota en el auto es un privilegio, una oportunidad para compartir momentos especiales. Hagámoslo de forma responsable, informada y segura. Cumplamos con las normas, no por temor a la multa, sino por amor a nuestros fieles compañeros. Porque su seguridad es nuestra responsabilidad.
Fuente: El Heraldo de México