La indignación recorre las redes sociales tras la difusión de un video que muestra la confrontación entre una propietaria y dos mujeres que invadieron su vivienda en Sonora. El incidente, que ha generado una oleada de críticas hacia las invasoras, se produce apenas un día después de que Carlota, una abuela de 74 años, fuera vinculada a proceso por la muerte de dos hombres que ingresaron ilegalmente a su propiedad en Chalco, Estado de México. Este último caso ha reavivado el debate sobre la vulnerabilidad de los propietarios ante las invasiones ilegales y la necesidad de encontrar soluciones que protejan sus derechos.

En el video de Sonora, la dueña de la casa increpa a las invasoras, quienes intentan justificar su acción argumentando la necesidad de vivienda de la sobrina de una de ellas, una mujer con dos niños. La invasora admite la ilegalidad de su acto, pero alega que la casa estaba deshabitada y que incluso la habían limpiado y pintado. “Lleva 10 años que no la habitan, no tenían en donde habitarla y lo hicimos ilegalmente, estoy de acuerdo”, declara la mujer, añadiendo que investigó con los vecinos antes de ocupar la propiedad. Sin embargo, la propietaria insiste en que la casa, aunque deshabitada, tenía candado y que la puerta fue forzada. "Me forzaron esta puerta, sí estaba sola la casa pero tenía candado", afirma.

La justificación de la invasora, lejos de generar empatía, ha desatado la furia en redes sociales. Usuarios la acusan de cinismo e ironizan sobre la idea de que la propietaria debería agradecerles por “arreglar” su casa. “La manera en que la señora trata de justificar y validar su intento de robo rebasa el cinismo”, comenta un usuario. Otro añade: “nada más falta que la señora invadida le tenga que agradecer a los okupas por pintar y arreglar su casa”. La polémica se centra en la legitimidad de ocupar una propiedad ajena, incluso en situaciones de necesidad, y en la falta de respeto a la propiedad privada.

El caso de Carlota, la abuela de 74 años que enfrenta un proceso judicial por la muerte de dos invasores en su propiedad de Chalco, añade otra capa de complejidad al debate. Mientras su defensa busca que se le otorgue prisión domiciliaria, la situación pone de manifiesto la difícil situación que enfrentan los propietarios que se ven obligados a defender sus hogares ante la inacción de las autoridades. Carlota, junto a sus dos hijos, se encuentra interna en el Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Chalco, acusada de homicidio calificado y homicidio en grado de tentativa. Este caso ha generado una ola de solidaridad hacia la adulta mayor, y muchos se preguntan si la justicia está del lado de las víctimas de las invasiones o de quienes las perpetran.

La coincidencia de estos dos casos ha puesto en el centro de la discusión la problemática de las invasiones de viviendas en México. Se exige a las autoridades una respuesta efectiva que garantice la seguridad de los propietarios y el respeto a la propiedad privada. Al mismo tiempo, se plantea la necesidad de abordar las causas subyacentes que llevan a las personas a ocupar viviendas de forma ilegal, como la falta de acceso a una vivienda digna. La conversación en redes sociales refleja la creciente preocupación por esta problemática y la necesidad de encontrar soluciones que protejan tanto a los propietarios como a quienes buscan un lugar donde vivir.