Imagina el aroma penetrante, el sabor robusto y la calidez reconfortante de una taza de café. Ahora, imagina que ese café no viene de un lugar lejano e impersonal, sino de las manos laboriosas de familias mexicanas, de tierras fértiles que han cultivado este grano por generaciones. Esa es la esencia de la campaña "Pide un café mexicano en lugar de café americano", una iniciativa que busca no solo revalorizar el café nacional, sino también impulsar la economía de miles de familias y preservar una tradición arraigada en nuestra cultura.

Josefina Rodríguez Zamora, secretaria de Turismo, ha hecho un llamado a la conciencia colectiva, invitándonos a reflexionar sobre nuestras elecciones de consumo. Cada taza de café mexicano que elegimos es una inversión en el futuro de nuestro país, un apoyo directo a las comunidades cafetaleras que dedican su vida a cultivar un producto de excelencia. No se trata solo de cambiar una palabra en nuestra orden, se trata de comprender el impacto que esa decisión tiene en la vida de miles de mexicanos.

La colaboración entre la Secretaría de Turismo, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) y la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur) demuestra la importancia de esta iniciativa. Un frente unido que busca no solo promover el consumo interno, sino también fortalecer la presencia del café mexicano en el mercado internacional.

Con más de 700 mil hectáreas dedicadas al cultivo del café en 14 estados, México se posiciona como un gigante en la producción de este preciado grano. Desde las exuberantes tierras de Chiapas y Oaxaca, hasta las fértiles laderas de Puebla y Veracruz, el café mexicano se distingue por su riqueza aromática, su sabor inigualable y la pasión con la que es cultivado.

Es un orgullo saber que México se encuentra entre los principales productores de café a nivel mundial, compitiendo con potencias como Brasil, Colombia, Indonesia y Vietnam. Y aún más gratificante es saber que nuestro café llega a los paladares más exigentes del mundo, incluyendo el mercado estadounidense, consolidando una importante relación comercial entre ambos países.

Pero más allá de las cifras y los datos, la campaña "Pide un café mexicano en lugar de café americano" nos invita a conectar con nuestras raíces, a valorar el trabajo de nuestros agricultores y a disfrutar de una experiencia sensorial única. Cada sorbo de café mexicano es un viaje a través de nuestras tradiciones, un homenaje a la tierra que nos nutre y un compromiso con el futuro de nuestro país.

La próxima vez que visites tu cafetería favorita, recuerda la importancia de tu elección. Pide un café mexicano, apoya a las familias cafetaleras y deléitate con el sabor auténtico de nuestra tierra. Únete a este movimiento y sé parte del cambio que queremos ver en México. Porque un café mexicano no es solo una bebida, es una historia, una tradición, un orgullo nacional.