
10 de abril de 2025 a las 12:30
Desentrañando las Elecciones Judiciales
La carrera hacia la renovación del Poder Judicial se ha convertido en una verdadera carrera de obstáculos. A poco más de una semana de haber iniciado las campañas, los candidatos se enfrentan a una serie de desafíos que ponen a prueba su capacidad de adaptación y estrategia. No se trata simplemente de presentar propuestas, sino de navegar un intrincado laberinto de regulaciones, captar la atención de un electorado abrumado por la complejidad del proceso y, en última instancia, convencerlos de que son la mejor opción.
Uno de los principales escollos, como bien lo señala el candidato a magistrado Rubén Jesús Lara Patrón, es la desconexión histórica entre la ciudadanía y el Poder Judicial. Este órgano, encargado de impartir justicia, ha permanecido tradicionalmente en una esfera distante, ajena a las preocupaciones cotidianas de la población. Acercar la justicia a la gente, desmitificar su funcionamiento y explicar su importancia en la vida democrática se convierte, por tanto, en un desafío crucial para los candidatos. Paradójicamente, esta misma lejanía representa una oportunidad única: la de construir un nuevo puente de comunicación y confianza entre el Poder Judicial y la sociedad.
A esta complejidad se suma el reto logístico que representa la propia jornada electoral. Con seis boletas federales y un número variable de boletas locales, dependiendo del estado, el electorado se enfrentará a una verdadera avalancha de información. Distinguir entre candidatos, cargos y números de boleta puede resultar abrumador, especialmente para aquellos que no están familiarizados con los procesos electorales. El riesgo de confusión y el consecuente voto nulo son amenazas latentes que exigen una campaña de información clara, concisa y accesible para todos. Imaginen la escena: un ciudadano frente a la urna, abrumado por la cantidad de opciones, con el tiempo corriendo y la presión de quienes esperan su turno. ¿Cómo garantizar que su voto sea informado y consciente? Ese es el dilema que enfrentan los candidatos.
La candidata Hasuba Villa Bedolla pone el dedo en la llaga al señalar la dificultad que representan los criterios del INE, en constante evolución y a veces contradictorios. Los candidatos deben caminar en la cuerda floja, buscando el equilibrio entre la promoción de sus candidaturas y el estricto cumplimiento de la normativa electoral. Un paso en falso puede significar la descalificación o, en el mejor de los casos, una sanción que mine su credibilidad. Esta situación exige una meticulosa planificación y una constante actualización sobre las reglas del juego, un verdadero desafío para los equipos de campaña.
Más allá de las dificultades técnicas, el verdadero reto radica en la conexión con el electorado. ¿Cómo convencer a la ciudadanía de la importancia de su participación en la elección del Poder Judicial? ¿Cómo lograr que se identifiquen con las propuestas de los candidatos y confíen en su capacidad para impartir justicia? La respuesta, según Villa Bedolla, está en la pedagogía. Los candidatos deben asumir el rol de educadores, explicando el proceso electoral, las funciones del Poder Judicial y las implicaciones de cada voto. Deben salir a la calle, dialogar con la gente, responder a sus preguntas y, sobre todo, escuchar sus inquietudes. Se trata de una labor titánica, que requiere no solo de conocimiento jurídico, sino también de empatía, paciencia y una genuina vocación de servicio. En definitiva, la elección del Poder Judicial se convierte en un termómetro de la salud democrática del país, una prueba de fuego para la participación ciudadana y un desafío para quienes aspiran a representar la justicia.
Fuente: El Heraldo de México