El clamor popular retumba con fuerza: la fe en la Selección Mexicana ha renacido. Tras un ciclo mundialista que nos dejó con un sabor agridulce, la reciente conquista de la Nations League, arrebatándole la victoria a Panamá en un emocionante 2-1, ha inyectado una dosis de optimismo en la afición. La victoria, bañada en oro dentro del imponente SoFi Stadium, no solo nos devolvió un título, sino también la esperanza.

Un estudio reciente, realizado por QM Estudios de Opinión en alianza con Heraldo Media Group, revela que el 64% de los mexicanos cree que el Tricolor marcha por el sendero correcto. El eco de los goles de Raúl Jiménez, figura indiscutible del encuentro, resuena en la confianza de la afición, convencida de que este triunfo es solo el preludio de una era de éxitos. Mientras un 32% mantiene una postura más cautelosa, la abrumadora mayoría se aferra a la ilusión de un futuro brillante. Un mínimo 4% se mantiene en la incertidumbre, expectante ante los próximos pasos del equipo.

La dupla Aguirre-Márquez, timonel y su mano derecha, se han ganado la aprobación del pueblo futbolero. Un contundente 82% respalda su continuidad al frente de la Selección. Su liderazgo, estrategia y la palpable química con los jugadores han convencido a la afición de que son los indicados para capitanear este barco hacia la gloria. Solo un 11% considera que es momento de un cambio en la dirección técnica, mientras un pequeño porcentaje se debate entre la indecisión y la neutralidad.

Con la Copa Oro 2025 en el horizonte, la Selección Mexicana se enfrenta a un nuevo desafío: consolidar su dominio en la Concacaf. Este torneo no solo representa la oportunidad de alzar un nuevo trofeo, sino también de pulir la estrategia y fortalecer el núcleo del equipo. La mira está puesta en el Mundial 2026, un evento histórico que compartiremos con Estados Unidos y Canadá, y para el cual la afición exige un equipo sólido, capaz de competir al más alto nivel y dejar el nombre de México en lo más alto.

El optimismo que se respira en el ambiente es palpable. La victoria en la Nations League ha sido un bálsamo para las heridas del pasado, un recordatorio de la grandeza que reside en el Tricolor. La afición, con renovada confianza, se prepara para acompañar a su equipo en esta nueva aventura, con la esperanza de presenciar el nacimiento de una generación dorada que nos regale la gloria mundialista.

La rigurosidad de la encuesta, realizada telefónicamente a una muestra aleatoria de 800 mexicanos, garantiza la representatividad de los resultados. El proceso de selección, auto ponderado, aseguró que todos los números telefónicos tuvieran la misma probabilidad de ser elegidos, ajustando los parámetros demográficos con el último listado nominal de 2024. Con un margen de error de +/-3.5% y un nivel de confianza del 95%, el estudio, llevado a cabo entre el 27 de marzo y el 1 de abril, ofrece una imagen fidedigna del sentir de la afición mexicana.