La energía vibraba en el aire del Parque La Loma. Cientos de nayaritas, unidos por la pasión por el deporte y el deseo de un futuro mejor, se congregaron desde temprano para participar en la Clase Nacional de Boxeo "Boxeando por la Paz". No era una simple clase de boxeo, era una declaración, un grito colectivo que resonó desde Nayarit hasta el Zócalo de la Ciudad de México, uniendo al país en un mismo propósito: construir la paz desde las bases, con disciplina, movimiento y comunidad.

El gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero, acompañado de la doctora Beatriz Estrada Martínez, presidenta del Sistema DIF Nayarit, se unió a la multitud, demostrando su compromiso inquebrantable con el deporte como herramienta de transformación social. Sus palabras resonaron con fuerza, haciendo hincapié en la conexión inseparable entre la salud física, mental y social. No se trata solo de prevenir enfermedades, sino de fomentar un estilo de vida saludable que permee todos los aspectos de la sociedad, desplazando la violencia y promoviendo la cohesión, el amor y la bondad, valores que, según el gobernador, son el camino para recuperar lo perdido y construir un futuro más brillante para las nuevas generaciones.

La clase, dirigida por la campeona mundial súper mosca CMB, Asley "La Chiquita" González, se convirtió en un símbolo de empoderamiento y superación. Cada golpe, cada movimiento, representaba la lucha por un Nayarit y un México más pacífico, donde la energía de la juventud se canaliza hacia la construcción de un mejor futuro. La inversión sin precedentes en el deporte en el estado, impulsada por el gobernador Navarro Quintero, es un testimonio de la importancia que se le otorga a esta disciplina como motor de cambio. El deporte, en palabras del gobernador, comienza como competencia, evoluciona a orgullo y culmina en un camino hacia la salud y el bienestar, un camino que Nayarit está decidido a recorrer.

El eco de las palabras de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, resonó con fuerza en cada rincón del país. "No a la violencia, no a las adicciones", gritaba la juventud mexicana. "No al racismo, no al clasismo, no al machismo". Un rotundo "sí" a la educación, al deporte, a la paz y al amor resonó en cada corazón. La Clase Nacional de Boxeo no fue solo un evento deportivo, fue una manifestación de la fuerza y la unidad del pueblo mexicano, un recordatorio de que la organización y la valentía pueden derribar cualquier obstáculo. Un grito de "¡Viva México!" que resonó desde el Zócalo hasta el Parque La Loma, un grito lleno de esperanza, de fuerza y de la convicción de que un futuro mejor es posible.

La presencia de destacadas figuras como la presidenta municipal de Tepic, Geraldine Ponce Méndez; la directora de INCUFID, Carolina Lugo Robles; la presidenta de la Asociación de Boxeo y comisario de la Federación Mexicana de Boxeo, Alejandra Ávila Dennis; el campeón Diego “El General” Gómez; el director del Instituto Municipal del Deporte, Eduardo Missael Espinoza Padilla; y la medallista Sara Carmona Oronia, reafirmó la importancia del evento y el compromiso de todos los sectores de la sociedad con la construcción de un México más pacífico y próspero. La Clase Nacional de Boxeo "Boxeando por la Paz" se convirtió en un hito, un recordatorio del poder transformador del deporte y la unidad, un símbolo de la esperanza que late en el corazón de México.