
8 de abril de 2025 a las 12:40
¡Más empleos formales!
El mercado laboral mexicano continúa mostrando signos de vitalidad, con un crecimiento sostenido en la creación de empleos formales. Entre enero y marzo de este año, se sumaron 226,731 nuevas plazas de trabajo, lo que representa un aumento del 1% en comparación con el cierre del 2022, según datos revelados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Esta cifra confirma la tendencia positiva que viene experimentando el país y nos invita a analizar las dinámicas que impulsan este crecimiento.
Alcanzando la impresionante cifra de 22,465,110 puestos de trabajo registrados, el panorama laboral mexicano refleja una estabilidad envidiable. De este total, el 86.8% corresponde a empleos permanentes, lo que brinda una mayor seguridad y perspectivas a largo plazo para los trabajadores. El 13.2% restante se compone de empleos eventuales, que si bien ofrecen una flexibilidad importante, también plantean el desafío de promover la transición hacia la formalidad y la estabilidad laboral.
Analizando el comportamiento mensual, el IMSS reportó un incremento de 34,179 puestos de trabajo en marzo, equivalente a un alza del 0.2% respecto a febrero. Este dato, aunque modesto, refleja la constancia en la generación de empleo y la capacidad del mercado para absorber nueva fuerza laboral. Más aún, la perspectiva anual nos muestra un panorama aún más alentador: en los últimos 12 meses, se crearon 175,765 nuevos empleos, lo que significa una tasa de crecimiento anual del 0.8%. Este crecimiento sostenido es un indicador clave de la salud económica del país y de la confianza de los empleadores en el futuro.
Desglosando el comportamiento por sectores, observamos que el comercio lidera la creación de empleo con un notable 2.6%, seguido de cerca por el sector de transportes y comunicaciones con un 2.3%. El sector de servicios sociales y comunales también destaca con un sólido 2.1%. Este dinamismo sectorial revela la diversificación de la economía mexicana y la capacidad de diferentes industrias para generar oportunidades laborales. El auge del comercio, por ejemplo, puede estar ligado al aumento del consumo interno y a la recuperación económica post-pandemia. Por otro lado, el crecimiento en transportes y comunicaciones refleja la importancia de la logística y la conectividad en un mundo cada vez más globalizado.
A nivel geográfico, Guerrero se posiciona como el estado con mayor creación de empleo, registrando un impresionante 5.4%. Le siguen el Estado de México con un 4%, Colima con un 3.8% y Nuevo León con un 3.5%. Estas cifras demuestran que el crecimiento del empleo no se concentra únicamente en las grandes urbes, sino que se extiende a diferentes regiones del país, impulsando el desarrollo local y reduciendo las brechas de desigualdad. El caso de Guerrero es particularmente destacable, ya que demuestra el potencial de las estrategias de desarrollo regional para impulsar el crecimiento económico y la generación de empleo.
En conclusión, el mercado laboral mexicano se encuentra en una fase de crecimiento sostenido, impulsado por la diversificación económica, la inversión y la confianza de los empleadores. Si bien aún existen desafíos, como la promoción de la formalidad y la reducción de la brecha salarial, las cifras del IMSS nos invitan a ser optimistas sobre el futuro del trabajo en México. El crecimiento constante en la creación de empleos formales no solo mejora la calidad de vida de miles de familias mexicanas, sino que también fortalece la economía nacional y sienta las bases para un futuro más próspero.
Fuente: El Heraldo de México