
8 de abril de 2025 a las 02:35
VIH en Nayarit: ¿Discriminación Silenciosa?
La sombra del estigma aún se cierne sobre quienes viven con VIH. A pesar de los avances médicos y la mayor comprensión sobre la enfermedad, el miedo irracional, la discriminación y los prejuicios persisten, impidiendo que muchas personas accedan a la atención médica y psicológica que necesitan. La reciente controversia en redes sociales, donde se vinculaba la infidelidad con el VIH, no hace más que perpetuar la desinformación y el estigma, reforzando la idea errónea de que el virus es un castigo moral. Este tipo de mensajes, lejos de promover la prevención, contribuyen a la marginalización de las personas que viven con VIH y obstaculizan los esfuerzos por erradicar la epidemia.
El testimonio del psicólogo Orfil Erubiel Aguilar Ibarra, del CAPASITS, pone de manifiesto la cruda realidad: el miedo al rechazo y la discriminación impiden que muchas personas se acerquen a los servicios de salud. Este temor, conocido como serofobia, no solo afecta la salud física de quienes viven con VIH, sino que también impacta su bienestar emocional y su calidad de vida. Imaginen vivir con una condición crónica y, al mismo tiempo, tener que enfrentar el peso del prejuicio y la exclusión. Es una doble carga que nadie debería soportar.
La serofobia se alimenta de la ignorancia y los mitos que aún rodean al VIH. Muchos creen, erróneamente, que el virus se transmite por contacto casual, como un beso o compartir utensilios. Estas falsas creencias perpetúan el miedo y la discriminación, creando un ambiente hostil para quienes viven con la enfermedad. Es fundamental desmontar estos mitos y promover información precisa y actualizada sobre el VIH. La educación es la herramienta más poderosa para combatir la serofobia y construir una sociedad más inclusiva y respetuosa.
Es importante recordar que las personas con VIH tienen los mismos derechos que cualquier otra persona. Tienen derecho a la salud, a la educación, al trabajo y a vivir una vida plena y digna, libre de estigma y discriminación. El CAPASITS, a través de su labor de atención integral, brinda un apoyo invaluable a las personas que viven con VIH y a sus familias. Ofrecen no solo atención médica, sino también asesoría psicológica y consejería, creando un espacio seguro donde las personas pueden encontrar información, apoyo y comprensión.
La lucha contra el VIH no se limita al ámbito médico. Es una lucha social que requiere la participación de todos. Debemos romper el silencio, desafiar los prejuicios y construir una sociedad donde todas las personas, independientemente de su condición serológica, sean tratadas con respeto y dignidad. Informarse, educarse y hablar abiertamente sobre el VIH son pasos fundamentales para erradicar el estigma y garantizar que todas las personas tengan acceso a la atención y el apoyo que necesitan. Si tienes dudas o necesitas información, no dudes en contactar al CAPASITS. Recuerda, la información es poder y la empatía es la clave para construir un mundo más justo e igualitario.
Fuente: El Heraldo de México