La tragedia que enlutó al Festival Axe Ceremonia 2025 continúa generando interrogantes y exige respuestas. A dos días del fatídico colapso de la estructura que arrebató la vida a los jóvenes fotógrafos Berenice Giles y Miguel Hernández, la incertidumbre se cierne sobre las causas del accidente y las responsabilidades que conlleva. La exsubprocuradora Bárbara Yllan, en una reveladora entrevista para Heraldo Radio, ha puesto el dedo en la llaga al cuestionar el cumplimiento de las normas de protección civil y la actuación de las autoridades.

Según Yllan, es crucial esperar el dictamen de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México para esclarecer si hubo alguna alteración en la normatividad. "La Fiscalía debe determinar cómo clasificó el hecho y quiénes, si es el caso, alteraron la normatividad", afirmó con contundencia. La experta enfatizó la importancia del peritaje para deslindar responsabilidades y comprender la cadena de eventos que condujeron a la tragedia.

Más allá de las responsabilidades de la empresa organizadora, Yllan señaló la necesidad de examinar la normatividad de la Alcaldía Miguel Hidalgo y su papel en la supervisión del evento. ¿Se limitó la alcaldía a otorgar el permiso, confiando en la “buena fe” de los organizadores, o existió una omisión en la tarea de supervisar el cumplimiento de las medidas de seguridad? La exsubprocuradora planteó la posibilidad de que, dependiendo de la respuesta a esta pregunta, la responsabilidad de la alcaldía podría ser significativa.

Un punto especialmente delicado que resaltó Yllan fue la información inicial proporcionada por la empresa organizadora, que reportaba a Berenice y Miguel como lesionados, cuando en realidad ya habían fallecido. Esta discrepancia entre la realidad y la información difundida genera profundas sospechas y plantea la pregunta de si existió un intento de minimizar la gravedad del accidente. En este contexto, la actuación de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), como primer respondiente, también queda bajo la lupa. Yllan cuestionó si la SSC valoró adecuadamente la situación y si tomó las medidas necesarias, como la suspensión inmediata del evento, tras el colapso de la estructura.

Finalmente, la exsubprocuradora expresó su esperanza de que la empresa organizadora esté asumiendo los gastos funerarios de los dos fotoperiodistas fallecidos, un gesto mínimo de responsabilidad ante la irreparable pérdida. Sin embargo, más allá de los costos económicos, la tragedia del Axe Ceremonia 2025 deja una profunda herida en la comunidad artística y periodística, y exige una investigación exhaustiva para que se haga justicia y se implementen medidas que garanticen la seguridad en futuros eventos. La memoria de Berenice Giles y Miguel Hernández no debe ser en vano, y su trágico final debe servir como un llamado a la responsabilidad y a la prevención para que eventos similares no vuelvan a ocurrir. Queda en manos de las autoridades la tarea de esclarecer los hechos, sancionar a los responsables y construir un marco normativo más sólido que proteja la vida de los asistentes y trabajadores en eventos masivos. El futuro de la industria del entretenimiento depende de ello.