
7 de abril de 2025 a las 17:15
Claudia resiste embate de Trump
La imposición de aranceles por parte del presidente Trump ha desatado una tormenta en el escenario económico global, una tempestad que amenaza con cambiar el curso del comercio internacional y redefinir las alianzas entre las potencias mundiales. En este contexto, la respuesta de México, bajo el liderazgo de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, se convierte en un caso de estudio sobre cómo navegar en aguas turbulentas. Miguel Ruiz Cabañas, diplomático con amplia trayectoria, ofrece un análisis preciso y revelador sobre la situación actual, destacando la estrategia de México y las posibles consecuencias de esta guerra comercial.
Ruiz Cabañas argumenta que la decisión de Trump es un error estratégico de proporciones históricas, un movimiento que podría impulsar el ascenso de China como potencia comercial dominante y marcar el inicio del declive económico de Estados Unidos. La unanimidad entre los expertos económicos, tanto en América como en Europa, sobre el impacto negativo de los aranceles, refuerza la gravedad de la situación. Este consenso, sin precedentes, subraya la preocupación generalizada por las repercusiones de una política proteccionista que amenaza con desestabilizar los mercados globales y provocar una recesión internacional.
La comparación que realiza Ruiz Cabañas entre la crisis actual y la de 1982, utilizando la metáfora del “timón y la tormenta”, resulta particularmente pertinente. Ante un escenario adverso, la capacidad de liderazgo y la serenidad en la toma de decisiones son cruciales. El diplomático destaca la respuesta de la presidenta Sheinbaum, quien, a pesar de no ser responsable de la crisis, ha demostrado una notable capacidad para mantener el rumbo y proteger la economía nacional. Su estrategia, basada en la cautela, la diplomacia y una planificación minuciosa, contrasta con las reacciones impulsivas de otros líderes mundiales.
La prudencia de México se justifica, en gran medida, por su estrecha dependencia comercial con Estados Unidos. Con el 83% de sus exportaciones dirigidas al mercado estadounidense, el país se encuentra en una posición delicada. Sin embargo, la cautela no implica pasividad. El gobierno mexicano ha desplegado una estrategia inteligente, enviando a su equipo diplomático, encabezado por Marcelo Ebrard y Juan Ramón de la Fuente, a negociar con sus contrapartes estadounidenses. Esta apuesta por el diálogo y la negociación, en lugar de la confrontación pública, demuestra una madurez política y una visión estratégica a largo plazo.
La estrategia de México, similar a la adoptada por Japón y el Reino Unido, prioriza la búsqueda de soluciones a través de canales diplomáticos, evitando la escalada de tensiones en el espacio público. En un mundo hiperconectado, donde las redes sociales pueden amplificar los conflictos, la discreción y la diplomacia se convierten en herramientas esenciales. El objetivo no es ganar una batalla retórica en Twitter, sino proteger los intereses nacionales a través de negociaciones estratégicas.
A pesar del panorama incierto, Ruiz Cabañas identifica oportunidades en medio de la crisis. La política proteccionista de Trump, paradójicamente, podría atraer nuevas inversiones a México. Los aranceles diferenciados podrían convertir al país en un destino más atractivo para las empresas que buscan diversificar sus cadenas de suministro y reducir su dependencia del mercado estadounidense. Esta coyuntura, si se maneja con inteligencia, podría fortalecer la posición de México en la economía global.
En definitiva, la "tormenta" desatada por Trump pone a prueba la capacidad de los líderes mundiales para navegar en aguas turbulentas. La respuesta de México, bajo el liderazgo de la presidenta Sheinbaum, destaca por su serenidad, estrategia y visión de futuro. El “timón” parece estar bien orientado, apuntando hacia un horizonte donde la crisis se convierte en oportunidad.
Fuente: El Heraldo de México