
4 de abril de 2025 a las 06:20
¿Visa dorada de Trump? ¡Descubre si calificas!
Un halo de exclusividad y opulencia envolvió la presentación de la nueva "tarjeta dorada" a bordo del Air Force One. El mismísimo Donald Trump, con su característico estilo, la reveló ante la prensa como la llave de acceso a la tierra prometida para la élite multimillonaria. Una especie de Santo Grial migratorio, bañado en oro, con la promesa de un acceso privilegiado a la residencia permanente y, eventualmente, la ciudadanía estadounidense. Cinco millones de dólares, la cifra mágica que separa al común de los mortales de este selecto club.
La imagen de Trump mostrando la tarjeta, con su propia efigie y firma, resonó en los medios como un símbolo de la era del capitalismo exacerbado. "Yo soy el primer comprador", proclamó con orgullo, dejando en el aire la incógnita de quiénes se sumarán a este exclusivo círculo. Una pregunta que ha desatado un torbellino de especulaciones y debates. ¿Quiénes serán los afortunados poseedores de este pase dorado al sueño americano? ¿Magnates de la tecnología, jeques árabes, estrellas de Hollywood, oligarcas rusos?
La opacidad rodea los detalles del programa. Más allá de la desorbitante cifra de cinco millones de dólares, poco se sabe sobre los criterios de elegibilidad. La incertidumbre alimenta la controversia. Expertos en migración, como Emma Prodromou de Mauve Group, advierten que este nuevo umbral podría disuadir a emprendedores con auténtico interés en contribuir a la economía estadounidense, favoreciendo en cambio a aquellos que buscan simplemente comprar su acceso al país. El programa anterior, que requería una inversión significativamente menor, permitía una mayor diversificación de los solicitantes, abriendo las puertas a talentos e ideas que podrían impulsar el crecimiento económico.
La "tarjeta dorada" se presenta como una herramienta de doble filo. Por un lado, promete inyectar capital a la economía estadounidense. Por otro, despierta el fantasma de una sociedad cada vez más estratificada, donde el acceso a los derechos y privilegios se determina por el grosor de la cartera. ¿Se convertirá Estados Unidos en un club privado para multimillonarios? ¿Se erosionará el principio de igualdad de oportunidades ante la ley?
El debate está servido. La "tarjeta dorada" ha destapado la caja de Pandora de las desigualdades y ha puesto en el centro de la discusión el papel del dinero en la configuración de las sociedades modernas. Mientras tanto, la imagen de la reluciente tarjeta, con la firma de Trump, continúa circulando en las redes sociales, alimentando la fascinación y la indignación a partes iguales. Un símbolo de una época marcada por la incertidumbre y la búsqueda de un futuro dorado, al alcance de unos pocos.
Fuente: El Heraldo de México