La tensión continúa en el aire. El conflicto legal que enfrenta a Maribel Guardia con Imelda Garza Tuñón, viuda de Julián Figueroa, lejos de apaciguarse, se intensifica con cada nueva declaración. Un torbellino de acusaciones y réplicas mantiene a la opinión pública en vilo, especialmente tras las recientes alegaciones contra Marco Chacón, esposo de Maribel Guardia, a quien se le señala por una presunta falsificación del testamento de Julián Figueroa, e incluso por un supuesto episodio de violencia. Tras semanas de silencio, Maribel Guardia ha roto su reserva para responder a estas graves imputaciones.

Con la serenidad que la caracteriza, pero con una firmeza inquebrantable, Maribel defiende la validez del testamento de su hijo, argumentando la lógica aplastante del documento: "El heredero universal es José Julián, mi nieto. ¿Por qué habría de ser falso?", cuestiona la actriz y cantante. Sus palabras transmiten la convicción de quien no encuentra motivos para dudar de la voluntad de su hijo. "Hubiera dudado si la herencia se hubiera repartido de otra manera, si me hubiera correspondido a mí, a Marco, a algún familiar… pero Julián, con gran sabiduría y amor, protegió a quien debía proteger: a su propio hijo", enfatiza.

La declaración de Maribel Guardia pone el dedo en la llaga de un asunto delicado: la separación de bienes entre Julián Figueroa e Imelda Garza. Al estar casados bajo este régimen, los bienes de Julián pertenecen exclusivamente a él, y por lo tanto, la decisión de nombrar a su hijo como único heredero resulta no solo comprensible, sino también natural. "Julián quería asegurar el futuro de su hijo, y eso es precisamente lo que hizo con su testamento", afirma Maribel, dejando entrever la profunda tristeza que le causa la controversia generada en torno a la memoria de su hijo.

El eco de estas palabras resuena en un contexto de dolor y confusión. La pérdida de Julián Figueroa ha dejado una herida abierta en la familia, y este litigio no hace más que ahondar en el sufrimiento. La opinión pública se divide entre quienes apoyan a Maribel Guardia y quienes cuestionan la veracidad de sus declaraciones. Sin embargo, la fortaleza y la transparencia con la que la artista ha enfrentado esta situación han generado una ola de apoyo y admiración.

Mientras tanto, la batalla legal continúa. Las acusaciones contra Marco Chacón siguen sin resolverse, y la tensión entre Maribel Guardia e Imelda Garza Tuñón permanece latente. ¿Qué nuevos giros dará este caso? ¿Se llegará a un acuerdo que permita a la familia encontrar la paz que tanto necesita? Solo el tiempo lo dirá. Lo que sí es seguro es que este conflicto familiar seguirá acaparando los titulares y generando debate en los próximos días. La historia, lamentablemente, aún está lejos de terminar.