La batalla legal entre Maribel Guardia e Imelda Tuñón se ha convertido en un culebrón mediático que mantiene en vilo a la audiencia. A cuatro meses de su inicio, el conflicto por la custodia del pequeño José Julián ha destapado una verdadera caja de Pandora, revelando no solo las presuntas adicciones de Tuñón, sino también un supuesto romance entre la viuda de Julián Figueroa y Marco Chacón, esposo de Maribel Guardia. El drama familiar ha escalado a niveles insospechados, con acusaciones cruzadas, declaraciones incendiarias y la participación de periodistas que, divididos en bandos, alimentan el fuego de la controversia.

Inicialmente, la custodia temporal del menor fue otorgada a Maribel Guardia, lo que desató una guerra de declaraciones entre ambas mujeres. Mientras Guardia señalaba las supuestas adicciones de Tuñón, esta última contraatacaba revelando una presunta infidelidad de Marco Chacón con una estudiante. Un mes después, Imelda recuperó la custodia de su hijo, compartiendo la noticia con una emotiva fotografía en redes sociales. Este triunfo, sin embargo, fue solo el comienzo de un nuevo capítulo en esta historia llena de giros inesperados.

La trama se complica aún más con la aparición de un testamento de Julián Figueroa, cuya autenticidad ha sido puesta en duda. Mientras Maribel Guardia y Marco Chacón aseguraban inicialmente que Julián no había dejado testamento, ahora afirman lo contrario, despertando sospechas sobre la legitimidad del documento. El reconocido periodista Gustavo Adolfo Infante, junto con el abogado de Imelda Tuñón, han declarado públicamente la posible falsificación del testamento, acusando a la pareja de intentar quedarse con la herencia del fallecido cantante.

En medio de este torbellino de acusaciones, un nuevo elemento se suma a la ecuación: un supuesto romance entre Imelda Tuñón y Marco Chacón. El rumor, revivido por el propio Gustavo Adolfo Infante, ha generado una ola de especulaciones y ha puesto en el ojo del huracán al esposo de Maribel Guardia. A pesar de las contundentes negativas de Chacón, quien calificó la acusación como una mentira para desviar la atención, la sombra de la duda persiste, alimentando el morbo de la audiencia y añadiendo un nuevo ingrediente a este drama familiar que parece no tener fin.

¿Qué sucederá con la herencia de Julián Figueroa? ¿Se comprobará la autenticidad del testamento? ¿Hay realmente una relación oculta entre Imelda Tuñón y Marco Chacón? Estas son solo algunas de las preguntas que mantienen en vilo al público, mientras la batalla legal entre Maribel Guardia e Imelda Tuñón continúa su curso, dejando a su paso una estela de controversias, secretos y revelaciones que prometen seguir dando de qué hablar. El tiempo dirá qué nuevas sorpresas nos depara este caso, que ha trascendido los límites de lo legal para convertirse en un auténtico espectáculo mediático. La audiencia, expectante, aguarda con ansias el próximo capítulo de esta historia que, sin duda, seguirá cautivando y generando debate.