
4 de abril de 2025 a las 00:25
Claudia, ¡la Presidenta!
La ovación resonó en el auditorio, un "¡Mucha Presidenta!" que se repetía como un eco, testimonio palpable del apoyo que Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, cosechó durante la presentación del relanzado "Plan México, fortaleciendo la economía y el bienestar". No se trataba simplemente de un evento político más, sino de una demostración de fuerza y unidad, donde la presencia de figuras clave del panorama político y empresarial mexicano validaba la importancia del momento. Gobernadoras y gobernadores, senadoras y senadores, diputadas y diputados, empresarios y empresarias, todos reunidos bajo un mismo techo, escuchando atentamente las palabras de la mandataria, un discurso que prometía un futuro de prosperidad y equidad para el país.
El ambiente vibraba con una energía palpable, una mezcla de expectativa y esperanza que se respiraba en cada rincón del recinto. La presidenta Sheinbaum, con la seguridad que la caracteriza, delineó los pilares fundamentales del ambicioso plan: mayor inversión, un incremento en la producción nacional y una decidida lucha contra la pobreza y la desigualdad. Sus palabras resonaron con fuerza, pintando un panorama de crecimiento económico, innovación y respeto al medio ambiente.
"Haré todo lo que esté en mi mente, mi corazón y mis manos para estar a la altura del pueblo de México", afirmó con convicción, subrayando la importancia de los valores que, según sus palabras, definen la identidad nacional: honestidad, autoridad moral y un profundo amor por la patria. La mención a la autosuficiencia y soberanía resonó con especial fuerza, en un contexto global cada vez más complejo e interconectado.
La presidenta Sheinbaum no solo presentó un plan, sino que trazó una ruta, un camino hacia un México más justo y próspero. Un México donde el empleo bien remunerado sea la norma, donde la innovación impulse el desarrollo y donde la sostenibilidad ambiental sea una prioridad.
Más allá de las promesas, la presidenta hizo un llamado a la acción, instando a las gobernadoras y gobernadores presentes a sumarse a este esfuerzo colectivo. Su confianza en la colaboración intergubernamental se percibió como un signo de fortaleza y liderazgo. El cierre de su intervención, con un vibrante "¡Viva México!" repetido tres veces, fue el colofón perfecto para un evento cargado de simbolismo. La respuesta inmediata de los asistentes, un entusiasta “¡Mucha presidenta!”, dejó en claro el respaldo que la mandataria tiene en su empeño por transformar al país.
Sin embargo, la presencia de representantes de solo algunos estados, como Aguascalientes, Baja California Sur, Durango, Guanajuato, Nuevo León, Oaxaca, Sonora y Veracruz, plantea interrogantes sobre la adhesión total al plan. La breve entrevista con Mauricio Kuri, gobernador de Querétaro, añade otra capa de complejidad al panorama. Si bien Kuri expresó confianza en la capacidad de negociación de la presidenta Sheinbaum, su incertidumbre respecto al presidente de Estados Unidos deja entrever los desafíos que el "Plan México" podría enfrentar en el ámbito internacional. Este matiz añade un elemento de suspenso y abre la puerta a futuras discusiones sobre la viabilidad y el alcance real del ambicioso proyecto.
Fuente: El Heraldo de México